miércoles, 30 de mayo de 2012

"Desde el cielo, siga repartiendo sonrisas". Recordando al P. Pablo (II)


Hay imágenes que se te graban en la mente cuando sos chico, imágenes de aquellos tiempos de guardapolvo blanco, y de cuando no veíamos la hora de que suene la campana para salir al recreo. La imagen "del Provincial" parado en un ángulo del patio del colegio, con chicos alrededor, como pollitos.

Novicio Martin y el P. Pablo, Claypole 1996
 Cuantas veces nos esperaba "el Padre Pablo" en el patio del San Vicente, para repartir sonrisas a todos, y estampitas de San Pablo solo a los que se llamaban "Pablo", como él. Nos visitaba "el Provincial"; mi conocimiento de la vida y de la Iglesia en aquel entonces no descifraba lo que eso significaba, ni tampoco me lo preguntaba. Para mi bastaba saber que él era "el Padre Pablo, el Provincial". 

27 de Noviembre de 1989, solemnidad de Cristo Rey. ¿Cómo olvidar aquel día, en que me bendijo junto a otros cinco compañeros de La Onda? Luego de la bendición mis papás me pusieron por primera vez el alba de monaguillo. Podría decir que aquel día también nació mi vocación sacerdotal.


Pasaron los años, y siempre el contacto filial, en persona o por carta, porque al P. Pablo le gustaba escribir y mandar por correo estampitas y "cartoline". Era como un apostolado que ejercía, especialmente en sus años en el Eremo.

Un día blanco de invierno Italiano, lo visité en Fumo. ¡Qué contento se ponía cuando lo visitaban argentinos! Nos contaba sus experiencias con Don Orione, de sus años en Argentina, nos hablaba de "Adolfo y Hugo", y de sus recientes encuentros con los "Alpini" de la Segunda Guerra.


También te daba lo que no tenía, te daba todo. Y a mí me dejo, no solo para mí, sino para la Congregación en Filipinas y para los misioneros que aquí estamos, un tesoro. Me dio las copias de su primera y tercera profesión religiosa (1937 y 1939), ¡firmadas por Don Orione! Sentí tanta alegría en mi corazón: ahora tendríamos en Filipinas estas preciosas reliquias, para que nos recuerden los ideales del Fundador, que también fueron ideales y amores del "Busso".

Formula de Profesión Religiosa, 1937, firmada por Don Orione

Gracias Padre Pablo; desde el cielo, siga repartiendo sonrisas.

P. Martin Mroz FDP
Misionero en Filipinas

1 comentario:

  1. Que belas redordações, Martin!! Que todos os exemplos de fé de P. Pablo (II) sejam seguidos por nós. Bjs, Carol

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