Un día mi papá, un hombre que ama el trabajo, se enojo con nosotros y nos dijo una frase que me quedó grabada: “si Don Orione estuviese acá, quemaría el sillón”.
Luego, nos conto una historia que él a su vez había escuchado.
Roberto Mela, papá del P. Facundo, trabajando en el torno |
Una vez, Don Orione vio un grupo de seminaristas recostándose en un sofá y peleándose por esa “poltrona” que había en el seminario, mi padre aun hoy repite la palabra italiana y agrega: “estaban apoltronados”. Entonces el Fundador puso el sofá en el medio del patio, llamo a todos los seminaristas, lo quemó y luego les dijo: “¡acá se viene a trabajar!”.
Mi papá pasó gran parte de su vida en la parroquia de Pompeya, donde conoció religiosos que se caracterizaron por ser grandes trabajadores: el P. Tomas Alonzo(1), el P. Ángel Pellizzari(2), el Hno. Dagoberto Molina(3), etc. Hombres a los cuales admiraba por su capacidad de trabajo y su amor al mismo.
En esa escuela orionita del trabajo, escuchó esta historia y le enseñaron que Don Orione había hecho esto porque quería que sus hijos, curas y hermanos, que sean hombres de trabajo y no señoritos, ni vagos.
Con los años, al ingresar en la congregación, volví a escuchar esta historia, e incluso leí el testimonio de algunos de los presentes. Pero siempre me quedaron grabadas las palabras de Don Orione, según el relato de papá: “¡acá se viene a trabajar!”.
De los escritos de Don Orione
“¿Cuándo fue visto Don Bosco tendiéndose en un sofá?
¡Si hubiesen entendido el significado de haber hecho quemar el sofá en medio de este patio el año pasado!
No solo era por el espíritu de la pobreza, ¡Era mucho más que eso! ¡Y un día lo van a entender bien!”(4)
[1] P. Tomas Alonzo de Atri (Teramo, Italia), muerto en Claypole, el 4 de Octubre en 1991, a 83 años de edad, 55 de profesión y 45 de sacerdocio.
[2] P. Angel Pellizari de Gossolengo (Piacenza, Italia), muerto en Génova (Italia) el 15 de Agosto de 2011, a 83 años de edad, 68 de profesión y 57 de sacerdocio.
[3] Hno. Dagoberto Molina de Núñez (Ciudad de Bs As), muerto en Claypole, el 1° de Septiembre de 1986, a 55 años de edad y 33 de Profesión
[4] Carta circular a los sacerdotes y seminaristas. Tortona, 3 de Agosto de 1920 (Scritti 52, 34) “Quando mai si è visto Don Bosco a sdraiarsi sul sofà? E se aveste capito cosa significava l’anno scorso l’aver fatto abbruciare in mezzo a codesto cortile il sofà! Non era solo per lo spirito di povertà, era ben altro! E lo capirete bene un giorno!”
¡Hola Facundo! Esta debe de ser una característica de todo orionista, el amor al trabajo, también al trabajo manual. Muchas veces hemos comentado los religiosos españoles que uno de los rasgos característicos de los curas orionistas italianos que vinieron a España era el trabajo. En el seminario de Dicastillo daban un buen ejemplo de trabajo y en el pueblo, de escasos 1000 habitantes la gente quería a los orionistas porque eran curas que trabajaban, en la huerta, arreglando los tejados, en la viña... No quiero citar nombres porque se me olvidaría alguno pero todos ellos habían aprendido de Don Orione el amor al trabajo y con ello sacaban el seminario adelante con sacrificio y mucho trabajo. Un saludo. Padre Teófilo
ResponderBorrarEstimado Facundo:
ResponderBorrarMuchas Gracias por acercarnos el espíritu de Don Orione a través de estas notas.
Una aclaración: el Padre Tomás Alonzo falleció el día 4 de octubre y no el 5, aunque en su tumba está escrito que falleció el día 3.
Un abrazo.
María Jesús.
Teofilo, como bien lo dices, el trabajo esta en el ADN orionita. Ojala sigamos siempre el ejemplo de Don Orione y de nuestros "hermanos mayores"
ResponderBorrarUn abrazo desde la Perla del Oriente!
María Jesús, gracias por la corrección, ya corregí el articulo.
ResponderBorrarUn abrazo desde Payatas